CRÓNICA DE UNA ONG FELIZ Y COMBATIVA
Sobre los fondos que algunas ong´s recibe y como se redistribuyen
Conmovidos por los recientes informes de extrema pobreza en el país, la Federación Liberal Mundial decidió presupuestar un importante monto para paliar sus más grandes necesidades. Tras recolectar cerca de cuatro millones de euros en interminables conferencias, simposiums, entrevistas, visitas a casas de multimillonarios y acuerdos con transnacionales no tan humanas, se inició el arduo proceso de redistribución de la riqueza, en la búsqueda de una opción que reivindique la crítica situación de los pobres.
Los primeros dos millones de euros debían ser distribuidos de modo equitativo (la otra mitad debía guardarse para posteriores gestiones). En principio, los altos funcionarios de las instituciones recolectoras del dinero consideraron pertinente recibir el 40% (menos de la mitad), para los pertinentes gastos en pro de la opción por los pobres, la Teología de la liberación, los derechos humanos, la defensa de los homosexuales, etc. El dinero recibido les permitió mantener los contactos desde sus amplias oficinas, recepcionar a otros funcionarios en las tres casas que cada uno posee (incluyendo una de playa), además de los cuatro autos último modelo de marcas extranjeras exclusivas, a fin de no caer en la sociedad de consumo.
El 30% del dinero fue destinado a las hermanas intermediarias Raquel Antúnez y Patricia Zarfatti. Nobles y abnegadas funcionarias dispuestas a sacrificar sus mejores años en defensa de los derechos humanos y la opción por los menos favorecidos desde sus casas en zonas privadas y exclusivas. Así, recibieron con mucho agrado el monto asignado para realizar numerosos viajes, talleres de capacitación, conferencias, clases de idiomas indígenas, montos para nuevas casas, autos, maestrías y doctorados de intelectuales que se han mantenido al margen de la pobreza para tener una distancia académica de un problema de alcance mundial.
El 20% restante fue designado a las ONG´s “La opción por los pobres”, “La voz de los que no tienen voz”, “Instituto para la misión de transformación” y “Estamos los que tienen que estar”. Los directores de cada institución (que al mismo tiempo forman parte de las directivas de las otras), aseguraron un “colchón proletario”, término designado a los fondos que ellos dispondrían para asegurar así su trabajo ininterrumpido a favor de lo más necesitados de las zonas urbano-marginales.
El siguiente 8% restante fue designado a los voluntarios y trabajadores de las ONG´s, quienes hacen una labor desinteresada y reciben un importante beneficio económico a favor de la lucha contra la pobreza y la exclusión. Con dichos fondos, los trabajadores decidieron organizar una jornada de eventos que convocaran a treinta líderes estratégicos que trabajasen en las zonas más alejadas de la capital y sean líderes eclesiales dispuestos a luchar por la defensa de los más necesitados. El taller llevó por título “La voz de Amós” y duró tres días en los cuales se hicieron dinámicas, se invitaron a teólogos como el Ps. Rómulo Asmat(recientemente convertido a la causa homosexual), Bernardo Campaña, Pedro Sullón (quien llegó tarde), David Simo (el cual no permitió que alguien más hable de temas de género pues solo él lo conoce a cabalidad) entre otros, quienes agradecieron formar parte de tan magno evento que incluyó gastos de movilidad particular, buffet internacional y criollo, habitaciones exclusivas, pago de dietas, desembolso de viáticos y entrega de laptops a cada ponente, siempre en pro de los más necesitados. Vale decir que cada uno llevó sus libros, los cuales fueron vendidos casi en su totalidad.
El restante 2% se presupuestó para realizar cuatro charlas en el año, dirigida a adolescentes, niñ@s y madres solteras, por ser un público más numeroso. Dichas charlas fueron convocadas por los líderes invitados al Taller. A fin de paliar la escasez y las condiciones de pobreza, se solicitó el trabajo de las madres para preparar bizcochitos con mantequilla y refresco de sobre (no gaseosa a fin de evitar la “sociedad de consumo” y usar material anti-ecológico). Se tomaron numerosas fotos, se grabaron videos, se tomó la lista con los DNI´s de cada participante y se elaboró un documento con las diferentes ideas de los que asistieron al taller, muchos de los cuales lo tuvieron que hacer caminando ya que la sede del taller se encontraba a varios kilómetros de distancia.
Al término, la pastora María cantó regocijada la canción “El profeta” del grupo Siembra, dichosa de haber convocado a las ONG´S participantes y formar parte comprometida del Reino de Dios y su construcción.
La información recopilada fue enviada por las ONG´s, que a su vez la enviaron a las intermediarias, que a su vez la enviaron a los funcionarios, que a su vez las enviaron a sus patrocinadores, que a su vez se sintieron conmovidos y están próximo a enviar otro importante fondo para el desarrollo del país, el cual deberá mejorar tras cuarenta años de constantes respaldos.